Batman: Soul of the Dragon reune a tres de los mejores artistas marciales del universo DC junto al Caballero Oscuro, para embarcarlos en una aventura de ambientación setentera, inspirada en el boom de las artes marciales y las películas de espías de la época.
La película está dirigida por Sam Liu y producida por Bruce Timm, responsable de la serie animada de Batman de los 90. El guionista es Jeremy Adams, quien también guionizó la película "Mortal Kombat Legends: Scorpion’s Revenge".
El doblaje integra a un elenco de actores de artes marciales de renombre: Kelly Hu (Lady Shiva) Mark Dacascos (Richard Dragon) Michael Jai White (Tigre de Bronce) y James Hong (O-Sensei). Estos junto a David Giuntoli, el actor de doblaje que interpreta a Batman, realizan un estupendo trabajo poniendo voz a sus personajes.
Queremos dejar claro desde un primer momento que la película ha superado ampliamente nuestras expectativas. Hacía mucho tiempo que no disfrutábamos tanto de una película de animación. El trato que la película le da a las artes marciales es una auténtica maravilla.
Siendo francos, Batman no es el protagonista principal de la película, parece que lo han usado como gancho dado que el resto de los personajes no son tan conocidos por el gran público. Además, Bruce Wayne pasa la mayor parte de los minutos de la peli “de paisano”. En mi opinión, el protagonismo está bastante bien repartido y si alguien destaca más, este es Richard Dragon.
Quizás a los fans más acérrimos del Caballero Oscuro les resulte desagradable este hecho y querían más protagonismo para su héroe. A mí, no me ha molestado lo más mínimo, más bien lo he agradecido. Aún así, hay bastantes guiños hacia Batman, para hacer notar a este personaje tan querido por el público.
Además de los protagonistas, en la película aparecen otros personajes del universo DC que no habían sido desvelados hasta la fecha. Todos ellos están inspirados en los personajes de DC, pero no se corresponden exactamente al universo creado por la editorial. Como ya se anticipó, se trata de una película con una historia propia y no una adaptación de alguna ya publicada en otro formato.
El origen de los personajes difiere completamente de la línea oficial. Para que todo el mundo pueda entender y poner en contexto la relación de los personajes, la película recurre constantemente a escenas retrospectivas (flashbacks). En estas escenas se aprecia como Bruce Wayne, Tigre de Bronce, Lady Shiva y Richard Dragon comparten maestro: O-Sensei y como conviven durante su entrenamiento.
La ambientación de los 70 está perfectamente lograda. Cuenta con geniales referencias al cine de artes marciales de la época y a las películas de espías. También aparecen claras referencias a un fenómeno más de los 80, el de los ninjas, que en este caso aparecen siempre como villanos junto a un grupo de cultistas ataviados de color verde “Cthulhu”.
Cuando anunciaron la película todo apuntaba a que las artes marciales tendrían un papel clave. Tras verla, yo diría que Batman: Soul of the Dragon es una película animada de artes marciales. Una muy buena película.Las escenas de lucha son constantes y te mantienen enganchado durante toda la película. Según como las cuentes rondan la veintena y tienen un gran nivel de detalle.
Aunque el grado de violencia no se acerca a la animación de Mortal Kombat, si cuenta con alguna escena subida de tono. En la película se muestra sangre, contusiones y muerte, por lo que según el criterio establecido no resultaría apta para el público más infantil.
CALIFICACION
Si te gustan las artes marciales es una película que no te puedes perder. Si además te gusta la animación y los superhéroes, la vas a disfrutar mucho. La película tiene un final completamente abierto y espero que hagan una segunda parte.