Reseña Realizada Por Arturo Santillan
Babylon nos muestra un Hollywood de los años veinte donde se vivía el apogeo de las películas mudas. En esta historia aparece Manny Torres (Diego Calva), un joven mexicano, soñador que busca trabajar en la industria del cine y ser alguien importante en esta. En este recorrido se encuentra con Nellie (Margot Robbie), una aspirante a estrella, y otras figuras importantes de la industria que no tienen idea que sus aspiraciones profesionales y su extravagante estilo de vida podrían verse afectadas cuando el cine toma un cambio radical: Las películas sonoras.
Con esta primicia pasamos la primera hora, de tres, conociendo la vida galante de los actores de cine mudo regalándonos escenas vibrantes. Un ir y venir de sueños y aspiraciones de persona que realmente mostraban su talento, el cómo se hacia la magia del cine (no es publicidad si no que nos paguen) y las aspiraciones de dos chicos jóvenes y ¿enamorados?
Pero, entremos al juego de hablar sobre las actuaciones… Vemos a un Diego Calva, actor mexicano, protagonizar una película de Hollywood, no como un narco ni un matón, cosa que se agradece. Este joven promete mucho y nos regala una escena final digna de mantenerse en el recuerdo de la gente que no se haya salido de la sala después de poco más de tres horas en la butaca. Aquí vale la pena señalar que Chazelle (director de la película) nos provoca una nostalgia tremenda de lo que yo llamaría, una oda al cine.
Margot Robbie una joven aspirante a actriz, que demuestra que no es joven en el mundo de la actuación demostrando porqué además de bella ha estelarizado varias otras cintas. En su caso, podemos mencionar la gloriosa escena que nos muestra el punto de partida de la película… Esa hermosa escena cuando el cine mudo comienza pasar su transición a cine sonoro y todas las complejidades que esto acarreó.
De Brad Pitt, podemos decir que está en el personaje correcto, ya que si bien no es malo, habla de un actor en decadencia y que no ha generado cosas que puedan ser nuevamente sorprendentes. Pero si de sorprendernos hablamos, Tobey McGuire, nuestro primer Spiderman, en 15 minutos de aparición nos regala escenas que son dignas de aplaudirse,qué nivel de actuación, que nivel de cine gore… Casi salía de la sala, he de confesar, pero por el miedo en que me envolvió.
Para finalizar puedo mencionar que Chazelle lo lográ nuevamente, dándonos cátedra de buen cine, buena fotografía, buenas historias y esa magia de envolvernos como lo hizo Lalaland, que, dicho sea de paso, me vino a la mente cuando sonaba música de Justin Hurwitz quien también es un maestro con eso de envolvernos entre escenas y vivencias.
Espero para cuando estén leyendo esto, puedan comentarnos su opinión y no se hayan perdido la oportunidad de ver esta joya en cines.
Pd. Compren bastantes palomitas y vayan al baño. ya que la película dura poco más de tres horas.